Clases de Gimnasia Abdominal Hipopresiva en Sevilla Este

A diferencia de otras técnicas posturales, los ejercicios hipopresivos producen una disminución de la presión intraabdominal, torácica y pélvica, a través de la expansión costal y de la apnea espiratoria que, junto con las posturas y ejercicios, activan las fibras musculares tónicas encargadas del tono muscular de los músculos posturales. Esta activación es involuntaria y a través de ella se logra trabajar músculos cuya función es fundamentalmente tónica. Músculos como los parietales del tronco, encargados no sólo de la función postural (estabilización, soporte, gestión de presiones, amortiguación de fuerzas...) sino también de funciones respiratorias, obstétricas y sexuales, de evacuación, etc. Entre estos músculos parietales se encuentran el diafragma torácico, el periné y la faja abdominal.

Así mismo, las técnicas hipopresivas producen una activación del Sistema Nervioso Simpático u Ortosimpático. El Sistema Nervioso Vegetativo se divide en Sistema Nervioso Simpático y Sistema Nerviosos Parasimpático. En determinados órganos el sistema nervioso parasimpático produce una activación en la contracción del músculo liso como en vejiga, tubo digestivo y órganos de la excitación sexual; mientras que en el resto, la contracción se verá activada por el sistema nervioso simpático (esta activación del músculo liso se produce de forma involuntaria). Es por ello que la activación del sistema nervioso simpático se traduce en la contracción de las fibras musculares lisas de varias estructuras como uretra, ano y vagina. Por ello, los problemas de incontinencia urinaria (de esfuerzo o de urgencia) y los prolapsos (cistocele, histerocele, uretrocele, rectocele) se benefician de este tipo de técnicas, unido al efecto de succión generado por la relajación del diafragma.

Todo esto junto a la normalización de las tensiones entre los músculos llamados “hiperpresivos” (diafragma torárico, isquiotibiales, trapecio, pectoral mayor, maseteros, pelvitrocantéreos, gemelos, cuadrado lumbar, dorsal ancho y romboides) y los “hipopresivos” (serrato mayor, faja abdominal, periné, espinales profundos, cuádriceps, gluteos, platisma y músculos faciales), se traduce en una serie de efectos beneficiosos que listamos a continuación.

• Tonificación del periné y la faja abdominal.
• Normalización de las tensiones musculares posturales y mejora de la postura.
• Aumento de la vascularización y metabolismo y, a largo plazo, de la resistencia a la acidosis.
• Aumento de la vascularización de los MMII y pelvis.
• Aumento de los parámetros respiratorios.

Como hemos visto la práctica de la gimnasia abdominal hipopresiva es muy beneficiosa. Especialmente, las técnicas hipopresivas están indicadas en/para:

• Corrección postural.
• Postparto preventivo.
• Tonificación de la faja abdominal.
• Fases deportivas del post-entrenamiento.
• Prevención de hernias de todo tipo (abdominales, inguinales, umbilicales, crurales, lumbares, vaginales, hiatales, etc.)
• Descongestión pelviana y drenaje vascular de los MMII.

Tal como indica Marcel Caufriez, las técnicas hipopresivas tienen también una serie de efectos secundarios como el aumento de la tensión arterial diastólica, activación de las contracciones uterinas, pérdida de 1,5 a 3 litros de agua y minerales, fatiga intensa y aumento de radiales libres.

Por estos motivos, es necesario rehidratar el cuerpo (preferiblemente con agua mineral) tras los ejercicios; así como la toma de antioxidantes, vitamina B2, coenzima Q10 y vitamina C.